Estar en “estado payaso” resulta fácil cuando oyes a tu público reir.

Es una espiral virtuosa…

…cuánto más se ríe, más estás en estado clown.

Cuando es así tienes la sensación de fluir. Vives un momento mágico. 

Un momento adictivo.

Suele pasar cuando tu público ya está “comprado”, es decir que ya te conoce, cómo ocurre al final de un curso donde amigos y familiares acuden a la muestra.

Pero…

…¿Cómo proceder cuando el público NO te desconoce?

…¿Cómo fluir cuando el público se queda silencioso?

¿Cómo generar un círculo positivo donde las reacciones de tu público vienen a apoyar y alimentar tu estado clown?

Estas son preguntas que tuve que contestarme porque los públicos delante de los que me presento, no suelen conocerme.

Si es algo que te resuene, has de saber que comparto las respuestas prácticas a estas preguntas durante mi intensivo Clownexión.

Porque el mundo en el que vivimos necesita conexión humana más que nunca

Y creo que los artistas pueden ayudar en ello.

¿Qué te parece?